Foto: Revista Scherzo |
La revista Scherzo se hace eco en su edición de ayer del gran éxito de La Cenicienta de Pauline Viardot en el Teatro Real, con el título de LA CENICIENTA DE VIARDOT, MUCHO MÁS QUE UN ESPECTÁCULO INFANTIL, a la que dedica todo tipo de elogios en su Crítica, pero que para nosotros y quienes somos sus amigos, dice algo de forma especial que nos llena de satisfacción:
La partitura de Cendrillon resulta de gran interés ofreciendo mucha riqueza musical y elementos variados: sutilezas armónicas, comicidad, líricas melodías a la francesa e incluso algún toque españolista oculto.
Su recuperación se debe al pianista Francisco Soriano, quien ha dedicado interesantes esfuerzos por recuperar estas óperas de cámara de Viardot. En esta ocasión supo llevar desde el teclado el peso musical de la obra, en su doble faceta de director musical e intérprete. Una parte nada fácil, escrita no como reducción sino para tener vida independiente, como muestra por ejemplo la riqueza de la escena de las transformaciones.
Recordamos hace años aquella producción en el Teatro Falla, donde acudimos los miembros de la ASAO, junto a los de la Barroca de Sevilla, gracias a una esplendida iniciativa de nuestro entonces presidente, el profesor D. Emilio Galán (q.e.p.d.) para ser testigos del éxito de nuestro amigo, el maestro Soriano.
Desde entonces, Curro se lo ha tenido que currar, hasta encontrar el apoyo incondicional del actual director del Maestranza, Javier Menéndez, para conseguir una magnífica producción en colaboración con el Real de Madrid, la Ópera de Oviedo, y el Cervantes de Málaga.
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