Cualquier aficionado a la Música, y queremos pensar que aún sin serlo, sabe que Johan Sebastian Bach Bach, que por algo se le considera el "Padre de la Música" sirve para todo, y así recientemente nos hemos referido a sus influencias en al Jazz y en los compositores modernos y contemporáneos.
Y lógicamente, también sirve para bailar, como la hecho la baronesa Anne Teresa de Keersmaeker, leyenda viva de la danza, y que este fin de semana hará una única actuación en Europa y será precisamente en el Teatro Central de Sevilla, ciudad de la que se enamoró cuando vino a actuar en los actos de la Expo 92.
Hoy se publican sendas entrevistas que ha efectuado a ABC y también al Diario de Sevilla, donde dice cosas de tanto interés como estas.
"La música de Bach siempre me incita a danzar"
Vivimos tiempos muy difíciles, nos enfrentamos a una crisis global, y creo que esta pandemia es en parte resultado del desequilibrio ecológico, de nuestra perversa relación con la naturaleza, del agotamiento de los recursos de la tierra. Creo que tenemos el reto de articular una respuesta que garantice nuestra supervivencia por las próximas décadas, somos seres vivos que nos hemos comportado con arrogancia y superioridad respecto al resto y si destruyes el medio natural te destruyes a ti mismo, dañas la esencia humana.
Aprecio en España, en Bélgica y en muchas partes que la gente necesita desesperadamente recuperar una idea de comunidad, de estar juntos, de celebrar y reflexionar, incluso de hacer el duelo juntos, ese papel que cumplían la iglesia o la religión. Tenemos que luchar por preservar ese espacio de humanidad.
Una muestra de lo que podrán disfrutar quienes se acerquen al Teatro Central.
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