El concierto programado para mañana por la OSC, y para el que todos seguro que tenemos ya la entrada, nos ofrecerá una verdadera muestra de música contemporánea, con compositores pertenecientes todos ellos al siglo XX.
Entre ellos, algunos tan conocidos, como Sibelius o Britten, lo que nos demuestra que no hay que remontarse a siglos anteriores para escuchar una magnífica música, teniendo todos ellos el gran mérito de haberse hecho populares en vida. A título de ejemplo, Britten falleción en 1976 y Sibelius en 1957, y muchas de sus obras son ya inmortales.
Si bien no escucharemos de ninguno de ellos sus composiciones más populares, como el Requiem de Guerra de Britten, o los poemas sinfónicos Finlandia y Karelia, Vals Triste o alguna de sus sinfonías en el caso de Sibelius, el concierto presente unos indudables atractivos, como por ejemplo otro de los poemas sinfónicos de este último: El Bardo, que en su corta duración de unos siete minutos, nos presenta un mundo elegíaco y poético, con una quietud inicial a cargo del arpa, con un final sentido de la renuncia o tal vez la muerte.
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