Se produjo la alegría desbordante de siempre y tuvo un brillante final con el Audiovisual preparado por nuestros compañeros, con una extraordinaria selección de fotografias a cargo de Mento y una banda sonora efectiva elegida por María Rosa, a lo que Pascual solo tuvo que añadir el aspecto operativo, para pasar 40 minutos recreándonos con todos los actos en los que hemos estado presentes en el pasado curso.
Una salva de aplausos y reconocimientos acogió el trabajo a su final.
Posteriormente y, como tambien es habitual, no encontrábamos el momento de la despedida. La primera en el mismo salón de proyección, otra en la planta baja del Casino Militar, otra en la propia puerta, taponando el tráfico peatonal de la misma, despues en la mismísma calle Sierpes y así hasta que los pequeños grupos nos fuimos dispersando, tras quedar para continuar con otro café, en distintos lugares del centro.
Todo eso son muestras del cariño inquebrantable que nos profesamos.
3 comentarios:
Un año más encuentro con "to sus habios": amistad, alegría, recuerdos...Preciosa amalgama de sensaciones vividas por todos. Pero, si de sentimientos hablamos, no quiero dejar de subrayar dos momentos entrañables, al menos para mí, recogidos magistralmente por la cámara de nuestro querido amigo Pascual, en las fotos 28 y 36.
¡Bienvenida de nuevo querida Eloisa!.
Paco,vuestras manos cogidas me hacen sentiros aún mas entrañables y... compañeros, pero del alma.
Besos para todos
Concha
Concha, ellos estaban a mi izquierda y, en un momento en que los miré, me di cuenta de que Carmen le tenía la mano cogida a su marido, mientras estaban entusiasmados mirando el audiovisual. Le dije a Josefina (que la tenía a mi derecha) que los mirara. Era una estampa llena de ternura.
Estoy contigo, a mi me emocionaron. Dos personas tan mayores, tan unidos. Una imagen preciosa. Un ejemplo
Yo creo que fue un día bueno para todos.
Pues la verdad es que yo los estaba viendo tambien pero no se me ocurrió hacer la foto hasta que Concha me lo dijo. Desde mi ubicación estaba pendiente de las caras de satisfacción de todos los compañeros.
Carmen me decía emocionada que en un momento dado, y a pesar de la enfermedad de Paco, le dijo que se encontraba en un momento muy feliz.
Pienso que eso ya merece la pena de cualquier cosa que podamos hacer.
Un beso para ti Concha y para ti Mento.
Pascual
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