Cuando se acude a presenciar un concierto, es oportuno conocer al menos someramente lo que se nos va a ofrecer.
Sin pretender efectuar ningún tipo de crítica, para lo que carecemos en absoluto de formación musical, nuestro comentario es el siguiente:
Al ver el cartel anunciador del Concierto, con la ROSS y nada menos que una sinfonía de Mahler, inmediatamente se piensa: Magnífico.
Al ver que se trata de la sinfonía número 4, nos viene a nuestra apreciación que es una obra poco Mahleriana, un poco extraña dentro de su catálogo, y de la que solo somos capaces de recordar su último movimiento, con la participación de la soprano. De hecho, es la sinfonía mas corta (aprox. 50 minutos) y la que cuenta con un tamaño orquestal mas reducido, con eliminación de instrumentos habituales en Mahler como los trombones y tubas.
Pero despues vemos que es la versión de Erwin Stein y que se trata de una adaptación para Soprano y Orquesta de Cámara, con habitualmente 12 instrumentos.
Todo lo expuesto no supone ningún demerito, puesto que sabemos de sectores de crítica musical que aprecian en esta versión contrapuntos geniales que se pierden en la vesión sinfónica, pero como decimos, es conveniente saber de antemano lo que vamos a escuchar.
Ofrecemos el primer movimiento de esta sinfonía en versión original Sinfónica, y el posterior arreglo de Stein para orquesta de Camara.
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