Su obra sirve de puente entre el bel canto de Rossini, Donizetti y Bellini, y la corriente del verismo y Puccini.
En sus primeras óperas mostró simpatía por el movimiento del Risorgimento, que buscaba la unificación de Italia.
También participó brevemente como político elegido.
El coro «Va, pensiero» de su tercera ópera, Nabucco (1842) —y coros similares en óperas posteriores—, estaban muy en el espíritu del movimiento de unificación y se llegó a considerar al propio compositor como un representante de estos ideales.
Sin embargo, Verdi, una persona intensamente reservada, no trató de congraciarse con los movimientos populares y, a medida que tuvo éxito profesional, redujo su carga de trabajo operístico y buscó establecerse como terrateniente en su región natal.
Fue autor de algunos de los títulos más populares del repertorio lírico, como los que componen su trilogía popular o romántica de su período medio: Rigoletto, El trovador y La traviata.
Hace años se pudo seguir en televisión una serie sobre su vida, que se poublicó posteriormente en una caja de 7 DVD, que por supuesto forma parte de nuestra videoteca. Solo se puede entender la obra de un Genio si se conocen detalles de su vida. Recomendamos que ningún amante de la Lírica se pierda aquella serie, si es capaz de encontrarla.
Nosotros hoy proponemos escuchar un fragmento de su descomunal Requiem, en una versión que pudimos disfrutar pocos días antes del comienzo oficial de la pandemia, Marzo del 2020 en Águilas, con Virginia Martinez dirigiendo a la Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia, y una de nuestras más admiradas sopranos entre los jóvenes que están destacando en el panorama lírico, la malagueña Berna Perles, que hace años resultó vencedora del Certamen de la ASAO.
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