HISTORIA DE LA GUITARRA

Antes de comentar algún aspecto del acto que nos reunió el pasado viernes en el Pabellón de Uruguay hemos de expresar nuestra admiración hacia nuestra amiga Pepi Bulnes, quien sin entrar a valorar etapas anteriores, también plenas de acierto, dedicación y trabajo, le ha dado un importante giro al Área de Flamenco, que agradecemos quienes como quien escribe no ha llegado de ser tocado por el duende del flamenco, pero que si nos vanagloriamos de saber de belleza y estética, y ambos conceptos aparecen a raudales en todas las producciones que hasta ahora nos ha ofrecido, junto a un espíritu y vocación de magisterio que nos ayuden a entrar por fin de pleno en este arte que concita la admiración de tantas personas.

El acto sirvió además para tener un recuerdo a nuestra querida directora y darle la bienvenida a otro estimado amigo que estamos seguros llevará al Aula por los mismos cauces de excelencia, puesto que a Jesús Dominguez Plata no le faltan conocimientos, ilusión y capacidad de trabajo para ello, demostrado además a lo largo de muchos años.

Tras este acto protocolario de presentación, el conferenciante José Luis Postigo nos hizo un recorrido por el mundo e historia de la guitarra desde sus orígenes, evolución, principales luthieres, clases de madera, materiales de las cuerdas hasta llegar a la invención y adaptación del nailon, mástiles, clavijeros etc y curiosidades como el uso del ajo  como pegamento.
También nos habló de su ambicioso proyecto que ya es una realidad como la Casa-Museo de la Guitarra que por cierto desde aquí abogamos y proponemos que quede incluido dentro de ese movimiento de la bienal de flamenco que tanto dinero genera a su alrededor.

Tras todo ello, vino la demostración práctica en la "hora de la verdad", el mágico sonido de la guitarra acompañado por Segundo Falcón al cante.

Finalizó el acto nuestro director Jesús Domingez Plata quien prometió propiciar y apoyas actividades como la que comentamos, todo ello al servicio de los alumnos del Áula

¡Cuando nos gustaría tener un mínimo de los conocimientos en flamencología que atesora nuestro amigo Paco Caballero, cuyo gesto de profundo éxtasis no decayó en un solo momento del acto.!

En definitiva, querida amiga Pepi, ¡Que grande eres! y que grande haces cuanto tocas.