El Patio central del Palacio Casa Salinas se quedó pequeño para albergar la cantidad de personas interesadas en asistir al concierto de ayer.
Somos testigos de excepción de las decenas de personas a las que hubo que decirles que era imposible el acceso y que querían hacerlo de cualquier manera, incluso de pie.
Se agotó hasta el último de los asientos para los afortunados que tuvimos ocasión de presenciar otro gran espectáculo musical.
Nos es complicado resltar ninguno de los interpretes sobre los demas, puesto que todos rayaron a una gran altura, Priya Mitchell al violín, Sofya Melikyan al piano, Tordell Thedéen al cello, el Quinteto Ethos, pero nos vamos a tomar la libertad de resaltar la figura de Benedicte Palko, a quien hemos elogiado en cantidad de veces como organizadora del Festival, y que ahora hacemos como excepcional pianista en el Trio para violín, cello y piano de Dvorak. Sencillamente: Nos cautivó.
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