VOLVEREMOS A VERNOS, QUE DIOS OS BENDIGA, ADIOS.
Estas fueron las palabras que pronunció "El Rey" el 26 de Junio de 1977 al terminar el que sería su último concierto ante 18.000 personas en el Market Square Arena de Indianapolis.
Allí se presentó con su clásico traje blanco con detalles dorados, como un dios azteca, siendo visible su delicado estado de salud, con sobrepeso e incluso dificultades para respirar, aunque su voz tenía todavía la capacidad de emocionar y conectar con el público.
El concierto lo cerró con "Can't Help Falling in Love" tras hacer un repaso a sus canciones más conocidas, en realidad todas lo eran, como "Jailhouse Rock", "Blue Suede Shoes", "All Shook Up", "My Way", "Love Me Tender", "Heartbreak Hotel", "Suspicious Minds", y otras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario