En Viernes Santo celebramos la Pasión de Cristo, con una liturgia austera; no de luto, sino de llanto esperanzado. Con celebración o sin ella, hoy podemos meditar la Pasión del Señor, orar el dolor de la humanidad; adorar la cruz propia o de los más cercanos, y la comunión con Jesús. (Dominicos Sevilla).
En estos días, seguro que es costumbre entre muchos de nuestros lectores la escucha de alguna de las Pasiones que compuso Bach, siendo la más habitual la que hizo según los escritos de San Mateo, una obra magna, que en estos días tiene un especial significado.
De entre todas las disponibles de forma pública y gratuita, que incorporen subtítulos, hemos de recurrir a Richter o Harnoncourt, y al menos nosotros este año nos hemos decidido por este último.
ESTAS RECOMENDACIONES ESTÁN BASADAS EN NUESTRAS PROPIAS AUDICIONES EN ESTOS DÍAS.
Y por supuesto a cualquiera de los magníficos Stabat Mater, dedicados a la Madre Dolorosa.
Recomendamos en esta ocasión la composición de Pergolesi, en el impresionante marco de la Iglesia de Nuestra Señora, en Dresde, de la que no quedó piedra sobre piedra en la segunda guerra mundial, y reconstruida tras la caida del muro de Berlín, que terminó en el año 2005, con donaciones llegadas de todo el mundo. Actualmente es un verdadero símbolo de la Reconciliación.
La grabación cuenta con las espléndidas voces de Anna Netrebko y Mariana Pizzolato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario