Son ya muchas las ocasiones en que hemos podido disfrutar de la magia del piano de Ruben Micieli, descubierto para España, en los Certámenes de Clamo Music, con su Director General Chema Casanova, y en sus actuaciones en los conciertos de ProMúsica Águilas, así como en los Conciertos de la Luna Llena, en una época en que Águilas era una "Ciudad de Música", y actualmente silenciada, o mejor dicho con otras músicas, o como se llame eso.
La última vez que le escuchamos fue en el Auditorio Victor Villegas de Murcia en Diciembre del 2024 con un asombroso Concierto de Paderewsky y pudimos verificar su gran evolución y madurez con el paso de los años, desde la primera vez, en que era apenas un niño.
Por tanto no nos extraña poder leer críticas sobre él, desde diversos lugares del mundo, como esta desde Florencia y de la que entresacamos algunos párrafos:
Ruben permitió que el bel canto de Chopin lanzase un hechizo como se podría esperar de un joven músico nacido a la sombra de Bellini en Catania.
Las actuaciones magistrales de la primera y tercera baladas mostraron la magnífica música de este joven con interpretación de autoridad aristocrática y sensibilidad.
Los últimos seis de los 24 preludios de Chopin fluyeron con una fluidez natural de la meliflua decimonovena donde se permitió que la melodía flotara sobre cuerdas de arpa eolica soportando las hazañas técnicas que se necesitan.
Y, por último, reseñar que Ruben ha sido seleccionado para acudir a Varsovia y presentar sus credenciales en la final del Festival Chopin.
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