La política o mas bien aquellos políticos que son inclultos, miserables y partidistas, olvidando que deben gobernar por el bien común del pueblo, y no para satisfacer sus gustos personales, arrogancias y vanidades, nos dan constantes ejemplos de su poca empatía con manifestaciones cultas, que muchas veces trascienden ese ámbito.
Tenemos muchos ejemplos de ello, que van desde pueblos a la propia nación, y quizás el más comentado en estos momentos sea la ausencia de representación en la reinauguración de la Catedral de Nôtre Dame, llegando incluso, no solo a los políticos, que están de paso, sino a las instituciones del Estado, con un silencio desazonador.
Reconocemos nuestro desconocimiento del protocolo para que esto suceda, aunque nos duela en el segundo de los casos, pero lo que sí sabemos es de Belleza, y en esa inauguración, no faltó la Belleza, en un pueblo como el francés, que muchas veces, quizás demasiadas, nos produce envídia.
El Romance de Paris, es una canción compuesta por Charles Trenet, y en el acto que comentamos fue interpretado por la cantautora Clara Luciani, acompañada por la Orquesta de Radio France, dirigida por Gustavo Dudamel, con unos efectos visuales que ni siquiera la lluvia pudo deslucir, sino aumentar la propia belleza
ESO ES BELLEZA Y SIEMPRE NOS QUEDARÁ PARÍS.
Y, a modo de curiosidad, proponemos escuchar la versión original de Charles Trenet.
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