Hoy en que se cumplen 196 de la muerte de Beethoven, queremos hablar de su famosa melena.
A la muerte del genio, fueron muchos admiradores y amigos quienes quisieron conservan mechones de su cabello, después de que los médicos le hicieran una craneotomía espantosa, en la que intentaban comprender en los pliegues de su cerebro el origen de su genio e incluso extirpando los huevos del oído para determinar los motivos de su sordera, y tres dias después de su muerte no quedada ni un pelo en el cadaver.
Con el paso de los años se hicieron muchos negocios con la venta de los mechones y con el estudio de uno de ellos, aparentemente auténtico, subastado por Sotheby's en el año 1994 y adjudicado por 7.300 dólares a la Sociedad Beethoven de América, se quiso determinar los motivos de su muerte, llegando a afirmar que tenía intoxicación por plomo y otras muchas cuestiones, que fue además el objeto de un libro en el año 2000 e incluso un documental.
Y ahora, The New York Times se hace eco y publica un estudio muy serio al respecto, donde se desmontan muchas cosas, partiendo de la base de que aquel mechón de cabellos que sirvió como muestra era realmente de una mujer judía asentada en Europa.
SUGERIMOS LA LECTURA DE TAN INTEERESANTE ARTÍCULO PULSANDO AQUÍ
No sabemos si Elisa recibiría en vida algún mechón de quien no obstante le dedicó una de las melodías más famosas de la música, pero esta circunstancia nos hace recordar otro famoso mechón de cabellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario