Nota remitida por nuestro compañero Pascual Muñoz.
Si bien nuestro viaje a Águilas está motivado de forma especial para estar presentes en la inauguración del Ciclo Sinfónico de ProMúsica Águilas, sobre el que ya se ha hablado en el Blog, lo cierto es que esta estancia ya para muchas más cosas que ofrece Águilas.
Mientras se está desarrollando a lo largo de un mes el XVIII Certamen de Teatro aficionado que lleva el nombre de Paco Rabal, el pasado domingo el Auditorio acogió a la Banda Sinfónica municipal con un concierto para Familias, realmente exquisito que nos hizo pasar dos horas en las que la expresión de felicidad fue contante en todo el público y por el que felicitamos a los rectores del Patronato Musical Aguileño "Francisco Diaz Romero".
Y por supuesto, también nos da tiempo para estar en la Glorieta y visitar a nuestra patrona la Virgen de los Dolores y asomarnos a uno de los muchos símbolos de Águilas, y que solo contemplarlo unos minutos nos sumerge en vivencias de muchos años de infancia y juventud, El Peñón del Roncaor, sobre el que podría escribir largo y tendido, pero que ahora no es el momento, sino solo indicar que la foto de ayer, una de las miles que guardo, la puse como perfil en mi Facebook personal, y que propició que la escritora aguileña, con tres librosde poemas publicados, Lucrecia Hernandez, habitual lectora de nuestro Blog y que sigue a La Décima a diario, me dedicara un precioso poema que quiero compartir con todos los miembros y lectores de La Décima, haciendo nota que yo no soy el destinatario, sino el propio Peñón del Roncaor.
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