UNA ORACIÓN

Seguro que muchos de nosotros hemos estado esta mañana, aunque no hayamos tenido ocasión de vernos en la numerosa manifestación por una España Unida, algo que incluso algunos de nuestros representantes políticos con representación en el Congreso de Diputados de nuestra Nación,  no llegan a tenerlo claro.

Tanto ellos como sus votantes sabrán lo que hacen con toda seguridad, o al menos les concedemos el beneficio de la duda, para no entrar en aspectos que no nos nos corresponde juzgar de forma pública.
Las redes sociales están en ebullición transmitiendo mensajes, algunos con una gran sensibilidad, y otros que pretenden ser graciosos, de no ser por tratar un asunto realmente dramático.
Pero en estos momentos, no queremos referirnos a todo eso, y solo estamos pensando en los hombre y mujeres que conforman nuestras Fuerzas de Seguridad.
Detrás de ese uniforme están personas jóvenes que pudieran ser nuestros propios hijos y que mañana presumimos que tendrán que enfrentarse a una situación realmente complicada, como es repeler agresiones que con toda certeza recibirán, y todo ello sin poder hacer uso de los medios de los que disponen, para que "nadie se moleste", a pesar de estar contraviniendo la Ley.
 A ellos queremos expresar nuestros mayores sentimientos de admiración, respeto y cariño, confiando en que reciban el apoyo y ayuda "Superior",   cada uno según sus creencias, que posiblemente no reciban de gran parte de la sociedad.