Conocida también como la sibila del Rin y la profetisa teutónica, es asimismo una de las compositoras más famosas de monofonía sacra, así como la más grabada en la época moderna.
Además, es reconocida por muchos expertos como la madre de la historia natural.
Aunque la historia de su canonización es compleja, diversas ramas de la Iglesia la han reconocido como santa durante siglos; el 7 de octubre de 2012, en la misa de apertura de la XIII Asamblea general ordinaria del sínodo de los obispos, el papa Benedicto XVI le otorgó el título de doctora de la Iglesia junto a san Juan de Ávila, en reconocimiento de «su santidad de vida y la originalidad de sus enseñanzas».
No hay comentarios:
Publicar un comentario