Quiso el azar, o mejor la Providencia, que el 21 de Noviembre de 2014, y con motivo de un viaje que efectuamos a Granada, visitando una exposición sobre la sanidad militar en el Parque de las Ciencias, un grupo de personas se mostraron gratamente sorprendidas al ver como nos paramos ante las imágenes del médico Vigil de Quiñones y nuestro compañero Miguel Simón alababa su figura e importancia dentro de la sanidad militar, al tiempo que su heroicidad al formar parte de los "Ultimos de Filipinas". Se trataba de familiares directos del recordado médico, al que también se honró en nuestra ciudad, dándole su nombre al nuevo hospital militar de Sevilla Hospital Militar Vigil de Quiñones en honor del médico de la guarnición de Baler. Permaneció en uso hasta 2004, cuando se anunció su transferencia al Servicio Andaluz de Salud y su remodelación, y que desde entonces fallece lentamente, sino lo ha hecho ya definitivamente.
Con esta introducción, solo queremos hacer notar los grandes conocimientos a la vez que sensibilidad de nuestro compañero con esta otra gran gesta de la historia militar española.
Comenzó su extensa conferencia, aunque a los presentes se les hizo realmente corta, con la historia de Filipinas, incorporada a la corona de España desde el año 1521 con la llegada de Magallanes hasta finales del siglo XIX en que la injerencia de los EE.UU apoyando a fuerzas insurgentes filipinas hizo imposible mantener una guerra en un lugar tan alejado de la peninsula, hasta que se firmó la paz en el tratado de Paris en Diciembre de 1898, cediendo las islas a los EE.UU.
En la última parte de la conferencia, Miguel explicó todo lo sucedido en Baler, desde ese Tratado de Paz, así como la actuación del gobierno de España en este asunto, en el que los militares, como en tantas ocasiones, estuvieron muy por encima de los políticos.
Si bien todo el público asistente quería escuchar más y Miguel aún tenía muchos detalles que contar, el horario del Círculo Mercantil, hizo que la conferencia no se pudiera prolongar por más tiempo, aunque ya tendremos ocasión de volver a escucharla, sin prisas, en otros marcos.
Finalmente, un fragmento de la banda sonora original de la película hizo surgir las lágrimas en muchas de las personas que en su momento fuimos golpeados y conmocionados por aquella película que nos hizo conocer la historia de Los Últimos de Filipinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario