DOCTOR ATOMIC

Suponemos que lo mas fácil y rentable económicamente para un teatro de ópera, es programar títulos en los que se apuesta sobre seguro y que se puede presumir sin error a equivocarse una alta asistencia.
Es por ello por lo que resulta digno de todo elogio el esfuerzo de nuestro Maestranza y especial y concretamente del maestro Haffter de haber traído a Sevilla a lo largo de varias temporadas, títulos difíciles de ver en otros teatros españoles.
En la presente temporada, junto a esos títulos como Don Giovanni, Norma y Tosca vamos a tener ocasión de presenciar en una apuesta arriesgada, una ópera del siglo XXI, estreno absoluto en España, y que suponemos servirá de llamada a aficionados a la lírica de toda España.

Ayer, y dentro de la programación conjunta de la ROSS y el CICUS, muchos de nosotros fuimos testigos privilegiados del Ensayo de una música que no puede dejar indiferente a nadie y que pudimos poner en situación, sin necesidad de cantantes ni textos, gracias las precisas explicaciones dadas por Pedro Haffter.
Pudimos seguir fielmente los momentos previos a la explosión de la bomba atómica en el desierto de Nuevo Mexico en un reflejo fidedigno de la tensión y ansiedad con la que los personajes del Proyecto Manhattan vivieron esos momentos.
La música terminó justo en el momento de la explosión de la bomba y nos dejó a todos los asistentes con el alma en vilo imaginándonos lo que vino detrás.

Hemos de suponer que los músicos de la ROSS vivieron también ayer esos momentos de tensión con unas interpretaciones realmente complicadas y resueltas con verdadero éxito. Los sonidos finales de la trompeta que nos evocaba el conocido tema de "El silencio", junto a la celesta y arpa nos hicieron reflexionar sobre la barbaridad histórica cometida.
Al terminar, todos teníamos en la mente las palabras mas pronunciadas tras la explosión en Hiroshima, y que forma parte del contenido de la ópera, según indicaciones de Haffter:
AGUA, ¿DONDE ESTÁN MIS HIJOS? NECESITO AYUDA.
Hemos de reseñar que Doctor Atomic es una ópera que apenas hay ocasión de presenciar y que entre los cinco años posteriores a su estreno en 2005, solo se ha representado 7 veces en todo el mundo, lo que nos puede dar un ejemplo del mérito de su puesta en escena en Sevilla.