Se componía de 2 niveles, al superior se accedía por 2 escalinatas protegidas por balaustradas, que una vez arriba servían para contemplar la fuente, la cual estaba presidida por una escultura de Iberia.
A ambos lados, se encontraban tumbadas las alegorías de los ríos, tanto españoles como americanos.
Éstas se encontraban sobre pedestales, que hacían las veces de surtidores de agua, la cual caía al estanque que se encontraba en el piso inferior.
Una vez pasada la Exposición de 1929, esta maravillosa fuente fue derribada de manera sorprendente.
Actualmente, 3 estatuas que formaban parte de esta fuente, pueden ser contempladas en los Jardines de las Delicias.
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