viernes, 30 de agosto de 2019

MARÍA JOSÉ CON LA VIRGEN DEL ROCIO

Nota que nos remite nuestra compañera María José 
Para aquellos de los lectores del Blog que no están muy familiarizados con lo que supone la Virgen del Rocío para sus fieles, y motivos por los que no está en su Santuario, conviene comenzar con una información básica.

La aldea del Rocío, donde se ubica el Santuario de la Virgen,  se encuentra a unos 15 kilometros del pueblo de Almonte. 
Es tradición que el día 19 de Agosto de cada siete años (y este 2019 es uno de ellos), la virgen se traslada a su pueblo de Almonte donde permanecera durante nueve meses, justo dos semanas antes de la romería del Rocío de 2020. 
La virgen recorrió el camino tras el asalto de la verja en la noche del 18 al 19, hasta llegar al Chaparral donde se le coloca en un altar hasta que amanece el día, y con los primeros rayos de sol empieza de nuevo la procesión hasta la Parroquia de Almonte. 
La imagen de la Blanca Paloma llega así a Almonte entre los vivas y las muestras de júbilo. 
El ajuar de la Virgen es tradición que sea aportado por las ancianas almonteñas, conocidas popularmente como “las abuelas almonteñas”. 



Los exornos de las calles son una arquitectura efímera basada en madera y papel que representan arcos triunfales y templetes sobre columnas de los más variados estilos arquitectónicos.
Dado que ya me encuentro finalizando mis vacaciones en Matalascañas, no podía dejar de visitar a la Reina de las Marismas en su Pueblo, y he recorrido los arcos triunfales hasta llegar a Ella.
Lo cierto es que quería expresar todas mis emociones del momento, pero han sido de tal intensidad que solo puedo expresar. VIVA LA DÉCIMA. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario