El 25 de Abril de 1926 se estrena en el Teatro de la Scala de Milán, la ópera de Puccini, Turandot, si bien él no pudo terminarla a causa de su fallecimiento, haciéndolo Fanco Alfano, por encargo del hijo de Puccini en el director Toscanini.
El origen de la historia de Turandot se remonta al poema titulado Las siete bellezas o Las siete princesas, obra de Nezamí Ganyaví, uno de los grandes poetas épicos de la literatura persa. Este poema relata la historia de un príncipe persa de la época sasánida, que tenía 7 princesas, cada una de ellas proveniente de un lugar distinto del imperio: Egipto, China, Rusia, Grecia, Turquía, India, Asia central. La cuarta princesa, de origen ruso, no encontraba ningún hombre que fuera digno de ella, y por eso se encerró en una fortaleza y declaró que se entregaría al hombre que la encontrara y pudiera resolver una serie de enigmas. Pero, antes, debía pasar por su “puerta secreta guardada por misteriosas espadas que amenazan con decapitar al intrépido” y donde los candidatos morían. Esta historia fue recogida por François de la Croix, un orientalista francés contemporáneo de Antoine Galland, traductor de Las mil y una noches, en una colección de cuentos llamada Los mil y un días. En esta obra se hace una transposición cultural de la princesa rusa original a una fría y cruel princesa china llamada “Turandokht”. Esta transposición tiene como objeto acentuar el carácter exótico de la historia.
Durante muchos años, la República Popular China prohibió la representación de Turandot, porque consideró que menospreciaba a China y a los chinos. Hacia finales de 1990 se reconsideró, y en septiembre de 1998 fue estrenada y estuvo durante ocho noches en la Ciudad Prohibida con opulentos escenarios y soldados del ejército como extras. Fue una producción internacional cuya puesta en escena estuvo a cargo de Zhang Yimou, como director de escena, y Zubin Mehta, como director musical. El protagonismo dramático-vocal recayó en Giovanna Casolla, como la Princesa Turandot; Sergei Larin, como Calaf; y Barbara Hendricks y Barbara Frittoli, alternando en el papel de Liú.
Y precisamente, esa es la producción, cuya visión recomendamos encarecidamente, puesto que a nosotros nos ha dado muchas satisfacciones desde hace más de 20 años que salió publicado el DVD, si bien entonces no tenía subtítulos en español, cosa que realmente tampoco era preciso.
Poder ver Turandot en la propia Ciudad Prohibida de Pekín, es un verdadero privilegio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario