La Fundación Beethoven, creada en Chile en el año 1976 acaba de publicar algunas conclusiones sobre los Beneficios de la Música Clásica.
El motivo argumental de esta Fundación es el siguiente: La música es un lenguaje creado por el hombre para el placer de sus oídos y alimento de su espíritu. Despierta los sentidos, transmite energía, acompaña y ayuda a desarrollar la imaginación y los sentimientos, contribuyendo a mejorar la calidad de vida de los seres humanos. La estimulación temprana de la música y las artes en la educación de los niños resultan esenciales para lograr su desarrollo integral.En el citado estudio, que se puede leer completo AQUÍ , se analizan algunos aspectos como éstos, y recomendamos la lectura de tan interesantes conclusiones.
La música influye en nuestro estado de ánimo y provoca una serie de sensaciones que afectan a todo el cerebro ayudando a reducir el dolor y la ansiedad.
Se ha demostrado la influencia positiva de la música clásica en el tratamiento de algunas enfermedades. Escuchar música clásica podría combatir el insomnio.
Tocar un instrumento puede mejorar la capacidad de aprender idiomas.
La música clásica reduce el estrés y podría ayudar a bajar la presión arterial.
Escuchar música clásica, así como aprender a tocar un instrumento y lenguaje musical, podría mejorar el rendimiento para que las personas obtengan mejores resultados académicos y sufran menos fracaso escolar.
Durante el embarazo, la música clásica estimula al feto.
La música clásica no hace milagros, pero a través de la práctica de un instrumento puede hacer más responsable y disciplinado a un niño.
Si eres habitual oyente de Música Clasica, ya sabes de lo que hablamos. En caso contrario, sugerimos comenzar por este tercer movimiento de la Sinfonía nº 3 de Brahms, y verificar si eres capaz o no de estremeceerte.
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