UNA OBOE, UNA DIRECTORA Y UNA ORQUESTA

Foto: Revista Codalario

Comenzando por la Oboe, queremos hablar de Cristina Gómez Godoy, una instrumentista jienense que se ha consolidado entre las grandes interpretes del panorama europeo para ser desde hace seis años la solista de la afamada Staastskapelle de Berlín y que antes lo fue de nuestra propia Real Orquesta Sinfónica de Sevilla y que acaba de grabar un album con los conciertos para oboe de Mozart y Strauss.

Y fue con el de éste último con el que la pasada semana actuó dirigida por la maestra Virginia Martinez junto a la OSRM, con un gran éxito de público y crítica, como no puede ser menos de alquilen que nos dice que "Con su oboe la parece acariciar el alma" y junto a una directora que es toda sensibilidad. 

Extractamos algunos párrafos de la crítica que le dedica la revista Codalario.

Su actuación con una de las obras cumbres de este repertorio lo ha constatado en esta ocasión en la que técnica y musicalidad se han dado la mano en paridad de importancia, llegando a un resultado de suma delicadeza concertante y por ende de máximo nivel artístico. 

Perfectamente coordinada con la titular de la orquesta, Virginia Martínez, encontró el secreto del estilo concertado en el primer movimiento con el conjunto de la ÖSRM en general y con la flauta y clarinete en particular, ámbitos de interacción paralelos que creaban una doble atmósfera expresiva que reflejaban la genialidad musical y capacidad instrumental del maestro bávaro, desde esa plenitud inabarcable de venir de vuelta de toda experiencia, afirmando, en esta obra, la condensada grandeza de lo sencillo. 

La solista llegó a plasmar con fantasía ese misterio en su escrupuloso y detallista discurso que se producía siempre con un subyugante equilibrio dinámico.