Todo el mundo pudo ayer disfrutar de la dirección de Muti al frente de los filarmónicos de Viena y hemos de expresar una vez más nuestra admiración ante un director que para nosotros representa el último representante, tras la muerte de Abbado, de una estirpe de directores, que remontamos a Toscanini.
Muti ha sido capaz de plantar a Carlos de Inglaterra a Camila y toda la familia real inglesa al negarse a atender sus caprichos, con motivo del 60 aniversario del principe Carlos, (no sabían con quien pretendian jugar) así como dejar en evidencia al poderoso, en su momento, Berlusconi ante una Teatro alla Scala repleto de público. Él se puede permitir desde su posición, esas y otras muchas cosas.
Muti recibió el Premio Principe de Asturias en el año 2011.
Pero queremos referirnos y recordar un memorable discurso que pronunció en el año 2010 cuando se le concedió en EE.UU el Premio al Músico del año, y que tras un prolegómeno pleno de humor terminó con esta frase.El director debe tomar el alma de los Músicos, su Música, sus Sentimientos........Marcar los tiempos cualquiera lo puede hacer. Hacer música es algo muy dificil .....porque después de las notas habita el infinito...que significa Dios.
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