HABLEMOS DE HILARY HAHN.

Hace unos días tuvimos ocasión de revisar un video sobre la vida de Hilary Hahn, en el que hablan de ella como una Leyenda, a pesar de su corta edad.

No ofrecemos ese vídeo por atención a nuestros lectores que no pueden seguirlo en inglés, pero hemos creido oportuno hablar de ella.

Hilary Hahn nacio en Virginia el  27 de noviembre de 1979 en Virginia es una violinista estadounidense, ganadora de dos premios Grammy.
Niña prodigio, a los 3 años se mudó a Baltimore, Maryland, donde comenzó a estudiar violín un mes antes de cumplir los 4 años, en el conservatorio Peabody. Dio su primer recital a los 9 años.
Su debut internacional fue en 1995, cuando interpretó, con solo 16 años, junto con la Orquesta Sinfónica de la Radio de Baviera y bajo la dirección de Lorin Maazel, el Concierto para violín y orquesta de Beethoven.
Cumplió los requisitos para graduarse en el Curtis Institute a los 16 años, pero decidió permanecer allí algunos años más para recibir varios cursos optativos de literatura, poesía, inglés, alemán e historia.
Durante este tiempo practicó el violín con Jaime Laredo y estudió música de cámara, contrapunto, armonía, historia de la música, composición y dirección musical, aunque indicó en una entrevista que la disciplina que más le interesa es la interpretación. Se graduó en 1999.
El 16 de abril del 2007, participó como solista con la Orquesta Sinfónica de la Radio de Stuttgart, en un concierto en la Ciudad del Vaticano dirigido por Gustavo Dudamel, para conmemorar el octogésimo cumpleaños del Papa Benedicto XVI; entre la audiencia se encontraban el Papa y otros dignatarios de la Iglesia. 
Ha recorrido el mundo entero tocando con la Orquesta Sinfónica de Londres, la Orquesta Filarmónica de Nueva York y la Orquesta Sinfónica de Singapur, entre otras. Aparte de su carrera como solista, ha participado en varios festivales de música de cámara.
Proponemos escucharla en un Concierto de Agosto de 2019 en un iglesia de Berna, en el que interpretó los Concierto para Violín de Bach, números 1041 y 1042, así como la fantástica composición Oblivion de Piazzolla.
Después de escucharla, se puede entender que ya se le considere UNA LEYENDA.