«Tirar de la manta»
Cuando alguien quiere amenazar con revelar algún secreto, que puede perjudicar y/o involucrar a terceros, se utiliza la expresión «tirar de la manta».Para descubrir el origen de esta expresión debemos trasladarnos hasta 1610, año en el que se colgó en la Catedral de Tudela (Navarra) un lienzo (manta) en la que estaba impreso el censo con el nombre y apellidos de los conversos que decidieron quedarse tras la expulsión de los judíos de la ciudad, a finales del siglo XV.
Durante más de cien años, la convivencia entre católicos y conversos se llevó a cabo sin apenas problemas, pero éstos surgieron cuando a los descendientes de aquellos convertidos se les comenzó a ofrecer empleos públicos o de servicio a la corona.
Los católicos auténticos no lo vieron con buenos ojos, por lo que se decidió crear un censo de cristianos viejos y exponer públicamente, para que todo el mundo supiera quiénes se habían convertido por conveniencia.
En la actualidad, la manta se expone en el Museo de la Sinagoga del Claustro románico de la Catedral de Tudela.
(Fuente: Ya está el listo que todo lo sabe. Alfred López).
No hay comentarios:
Publicar un comentario